En México existe una brecha salarial de género que se profundizó con la contingencia. En 2020, las mujeres percibieron 857 pesos menos que los hombres en promedio, según datos del Coneval.
Más que un festejo o celebración, el Día Internacional de la Mujer es un recordatorio de la lucha que las mujeres han mantenido por siglos, a fin de obtener equidad, el reconocimiento de su trabajo y justicia ante las condiciones en las que se les ha impuesto desde hace muchos años.
En el mundo de la administración de condominios el rol de la mujer ha cambiado a pasos agigantados; gracias a las iniciativas de mujeres líderes, el reconocimiento de sus capacidades y su empoderamiento.
En ComunidadFeliz queremos que conozcas cómo es ser administradora de condominios en la actualidad, a través de la historia de 3 exitosas profesionales que han triunfado en este campo de trabajo.
Ser administradora de un condominio en México no es tan fácil como parece. Tener que lidiar con los propietarios, otros administradores y el gobierno puede ser todo un reto.
“El principal desafío es convencer a la gente” nos comenta Virginia Peña, una administradora con 10 años de trayectoria. ”Presentar un proyecto es un reto muy bonito, pero también tienes que pensar como les puede afectar a los condóminos y como lo pueden ver de forma positiva para que aprueben tu proyecto” revela a ComunidadFeliz.
Definitivamente, si quieres ganarte la vida con ello, tienes que ser un especialista en muchas áreas (desde la parte legal sobre cómo interpretar la ley hasta aspectos técnicos, como reconocer cuándo es necesario el cambio de una pieza en la sala de bombas) y tener habilidades de escucha activa y convencimiento.
Alicia Zamblé, administradora de condominios, nos comparte que sus principales desafíos fueron en su momento, la falta de experiencia y mi corta edad. Esto porque cuando un profesional es joven en el rubro, se le tiende a subestimar y tampoco es un secreto que sin experiencia de otros condominios y siendo mujer, no muchas personas le habrán tomado en serio.
No obstante, esto no fue motivo para rendirse, sino para continuar formándose y tocando puertas hasta conseguir su primera comunidad.
Asimismo, Alicia nos cuenta lo complicado que era el rubro en sus inicios “La gente desconocía lo que era un administrador de condominios y la necesidad de tenerlo”.
Las mujeres tienen habilidades que deben ser reconocidas y consideradas a la hora de administrar condominios y remunerarse. “La capacidad de administración innata que tenemos las mujeres y la atención para enfocar distintas cosas a la vez es fundamental para desempeñar esta labor” comenta Alicia.
Los condóminos suelen tener difuso el límite acerca de cuáles son tus responsabilidades como administradora. “Se debe ser muy organizada e imparcial para poder sugerir al beneficio de todos” comenta Gabriela Rodríguez, quien es administradora del condominio donde vive, con la finalidad de cuidar su patrimonio.
De igual forma, el empoderamiento y autoliderazgo son valores que requieren más trabajo a nivel personal, pero que traen mayores frutos cuando deben negociar o enfrentar un conflicto.
“Me tocó cruzar una época en la que las mujeres eran secretarias y pocas eran las que tenían un buen puesto, y efectivamente, por el hecho de ser mujer te ven como que no tienes la capacidad ya sea de conocimientos o para enfrentar una situación difícil” revela Virginia en su entrevista. “Te ven como débil de carácter y que no vas a poder enfrentar los principales problemas”
Todavía no se alcanza la igualdad en la conducta diaria de las personas; es decir, igualdad de facto. Esto es necesario para garantizar el pleno acceso y ejecución de los derechos de las mujeres, sobre todo en el ámbito laboral.
“Nos toca como mujeres perder el miedo a exigir lo que nos corresponde y así reducir el gap que existe” comenta Gabriela. “No debemos esperar a que la situación cambie por sí sola, debemos empujar para que eso suceda siempre, no puedes dejar en manos de los demás, el futuro de tu carrera profesional”.
Conoce las recomendaciones que le hacen estas exitosas administradoras a las que apenas van iniciando en el mundo de la administración de condominios.
Alicia: “Mis recomendaciones son mantenerse en constante capacitación, este no es el típico trabajo que puedes hacer solo por obligación, de verdad hay que amar lo que haces, tener la disposición de servirle a tus clientes y la capacidad de resolver conflictos”.
Virginia: “Mi recomendación es que tengan mucha fé y confianza en sí mismas, que no se dejen amedrentar. Que en todo momento sus argumentos, su profesionalismo y sus ideas sean las que hablan. No se permitan ser víctimas ni que las pongan en un lugar de defensa, ellas son y valen por sí mismas por lo que saben y todo lo que puedan hacer”.
Gabriela: “Lo básico siempre es lo más funcional, no se compliquen armando reglas por todo, por un momento pónganse en el lugar de los inquilinos y pregúntese ‘Con todas estas reglas ¿Me gustaría vivir aquí?’. Sin duda, tener una aplicación como ComunidadFeliz brinda la tranquilidad de que el control y administración está registrado para asegurar la estabilidad económica de su condominio”.
Alicia Zamblé inició como administradora de condominios desde hace 5 años. Radica en León, Guanajuato y está certificada por la PROSOC en la CDMX. Es fundadora de AYSIC, una empresa que ofrece asesorías y servicios integrales a condominios
Virginia Peña es administradora de profesión con 10 años de experiencia en la CDMX. Incursionó en el mundo de los condominios por cuenta propia, ya que se dio cuenta de los problemas que surgen entre condóminos.
Gabriela Rodríguez es administradora ad-honorem. No percibe ningún salario por su gran labor, pero se ocupa de su patrimonio con pasión y con la vista puesta en el futuro.
Los problemas que limitan la erradicación de la violencia y desigualdad laboral contra la mujer mexicana se deben a factores socioculturales que han sido acuñados a través de los años por la sociedad actual.
Con todo esto, en un contexto de reivindicación de los derechos de las mujeres, no solo es necesario, sino urgente empezar a generar espacios más sanos y justos que conformen mejores ambientes laborales y, por ende, más productividad y un mayor beneficio económico para las empresas.
Los equipos con diversidad de género superan a los que no lo son y de acuerdo con Catalyst, las empresas con la mayor representación de mujeres en sus equipos obtienen un 34% más de ganancias que las empresas con menor representación femenina.
Desde ComunidadFeliz exhortamos a la sociedad a buscar la equidad y rechazar cualquier discriminación por género, raza o condición. La equidad es excelente para el negocio de las empresas, próspera para la economía de un país y extraordinaria para todos porque nos lleva a mejorar en todos los espacios de nuestra vida.